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La compañía Lenguas divergentes reflexiona entre la situación de los jóvenes adulto;, dónde están parados, hacia dónde van, cuáles son sus aspiraciones.
Hacia un conteo infinito, escrita por Miranda Rinaldi y dirigida por Carlos Luna, revalora tanto el papel de la mujer como el del hombre en la sociedad contemporánea, los arquetipos bajo los cuales se ha formado su identidad y qué deben hacer para continuar su vida.
La dramaturgia habla de dos chicos que se encuentran en un antro y se dan cuenta que están vacíos por dentro. Rinaldi señaló que esto es por los cuestionamientos que se hacen los jóvenes adultos “de que queremos encontrar la felicidad, de las aspiraciones que el mundo parece querernos dar, y al final nos damos cuenta que tenemos un vacío existencial porque también hay una pérdida de fe en muchos sentidos” por los valores y los sistemas de pensamientos que establece la cotidianidad.
Rinaldi dijo que buscó hacer un replanteamiento de La señorita Julia, de August Strindbeg, así como “qué significa ser mujer en esta sociedad y eso, querer ubicar dónde está la mujer contemporánea joven hoy en día”.
La escritora de la obra dijo que los nombres son simbólicos, y que buscó abordar la muerte, situación que se ve hoy día en la mayoría de las ciudades del mundo. Agregó que optó por insertar un poco de la estética de lo que es el universo, manifestándolo como el deseo por llegar a ser polvo de estrella para incorporarnos al universo.
Lenguas divergentes es una compañía independiente formada por jóvenes egresados de UDLAP, CUT y ENAT, que busca establecer un diálogo con gente de su generación. “Sobre todo porque nuestra preocupación es en dónde nos encontramos como individuos y como personas”.
La obra se presentará los viernes a las 20:30 horas, del 1 de abril al 24 de junio, en el Foro Shakespeare. El costo de acceso es de 200 pesos.
Texto: Néstor Ramírez Vega (@NestorRV)
Fotos: Cortesía (Foro Shakespeare)
