La Merced: Comer con la sazón auténtica de la gastronomía de Oaxaca es de valorarse, pocos lugares en la Ciudad de México logran satisfacer el paladar de los nativos que han emigrado al centro del país. Y algunos de ellos se han encargado de traer consigo semejante comida tradicional con el objetivo de establecer desde austeros locales de comida, hasta restaurantes.
En el transitado barrio de La Merced en el Centro Histórico existe una calle Santísima, paralela a la calle Soledad y Emiliano Zapata, en ese espacio podremos encontrar tres establecimientos dedicados a la venta de productos de Oaxaca. Aquí es Oaxaca y Oaxaca en México, son 2 de los comercios más antiguos en el lugar y su oferta es demasiado tentadora como para no llevarse unos cuántos antojitos.
Afuera del establecimiento Aquí es Oaxaca, establecido desde 1960, aún se percibe el aroma de la carne enchilada y la longaniza de puerco en el asador con la brasa a punto de apagarse, uno de los vendedores, mientras plática con los clientes, prepara el téjate en un enorme recipiente de madera dejando que la espuma sobresalga de su capacidad, éste es un famoso elixir espirituoso entre los oriundos oaxaqueños.
Al interior del local, a primera vista se aprecian los panes apilados, el chocolate para olla en diferentes presentaciones, los quesos, carnes, entre otros alimentos típicos de la entidad, además se comercializan fórmulas en polvo para preparar agua de diferentes sabores, pero sobresale el que es para téjate, a base de cocoa y maíz, que rinde aproximadamente 5 litros.
El dueño del establecimiento presume ser el proveedor más antiguo al mostrar la antigua foto de su suegra vendiendo en el lugar hace ya muchos años “nosotros traemos mercancía fresca cada semana desde hace más de 55 años, mi suegra fue quién comenzó con la venta en este local, y preparaba las tlayudas y otros alimentos, aquí todo la traemos desde Santa María del Tule, muy cerca de la capital de Oaxaca”.
Al caminar sobre la pequeña cuadra, más adelante también se dejan lucir los productos oaxaqueños a los ojos de los paseantes, hay de todos los panes, chocolates, también ollas de barrio en tonos verdes para preparar bebidas calientes o frías, carnes, las famosas tortillas tlayudas en paquetes de 10 ó 20, entre otros alimentos, que nos traen los proveedores de Aquí es Oaxaca.
Otro atractivo local, es un pequeño lugar donde preparan quesadillas, sopes, entre otros alimentos de maíz, las vendedoras con uniforme azul, se apresuran al atender a cada persona que accede al lugar. “Hay de frijol, requesón, haba o chicharrón”, anuncia una de las encargadas del pequeño local tapizado de fotografías enmarcadas de Emiliano Zapata y de la época revolucionaria. Es decir, ahí pisaba el general para degustar de los clásicos antojos mexicanos, que desde esa época ya eran famosos en la calle Santísima, donde precisamente se ubica la parroquia de la Santísima Trinidad.
En el Centro Histórico, y más lejos, todos hemos escuchado acerca del famoso mercado de La Merced, ya sea por su gran variedad de frutas y legumbres, entre otros alimentos, y por ser el lugar perfecto para adquirir material decorativo de eventos especiales –fiestas, mejor descritas por Octavio Paz, como la inevitable tradición mexicana–.
Pero no se dejen engañar, pues no sólo podemos concebir al mercado de La Merced como tal, sino más bien estamos hablando de un barrio antiguo de la Ciudad de México ciertamente estigmatizado, pero con secretos muy antiguos, este caso la calle Santísima resguarda desde hace muchos años un lugar perfecto para surtirnos de aquellos deliciosos productos oaxaqueños.
Por: Jocelyn Medina
@RevistaExt